Comenzamos analizando el estado del hardware que se encontrába en la Institución, en desuso hace mucho tiempo.
A medida que realizábamos esta acción, tomábamos nota de todo lo relacionado a estos dispositivos, por ejemplo: el estado de la memoria RAM, del disco, de las lectoras, etc.
Otros integrantes del grupo se encargaban de limpiar monitores, teclados y mouses, para luego poder corroborar como se encontraban.
Una vez que terminemos de evaluar el estado del hardware, deberemos reemplazar aquellas partes no funcionales y comprobar su correcto funcionamiento.
Luego seleccionaremos una distribución de Linux como Sistema Operativo y lo instalaremos en el equipo.
Por últimpo debemos comprobar que todo funciona correctamente, para luego comenzar a evaluar el paquete de software de aplicaciones a instalar.
Si bien tenemos mucho trabajo... hay muchas ganas de aprender y superar este desafío.
Hasta la próxima entrada...