Los docentes y las Tics

Cuando hablamos de las TICs nos referimos a todo lo relacionado con la  Informática, la microelectrónica, la multimedia y las telecomunicaciones, o sea es la utilización de los medios informativos y comunicativos más actuales.

Uno de los retos más grandes al profesorado actual, es la alfabetización en los  sistemas digitales y la utilización de estos para su formación.

Son muchas las herramientas que los profesionales de la educación tenemos a nuestro alcance, pero -esto se repite reiteradamente- no podemos utilizarlas como lo hemos hecho hasta ahora con los libros de texto y las tradicionales pizarras. Estos recursos han de servirnos para dar un giro a la manera de plantear los contenidos a nuestros alumnos y así motivarlos para que su aprendizaje sea consecuente con la sociedad de la información y el conocimiento en la que estamos inmersos.

 Ya no sólo es la preparación y presentación de un  Power Point en el aula, ahora es el dominio de una serie de conocimientos que se necesitan para orientarse en el uso de plataformas de enseñanza.

Pensamos que los cambios deben ser graduales en cada una de las instancias educativas de enseñanza, comenzando en el ciclo inicial, e ir gradualmente vinculando al estudiante con formas más complejas y dinámicas. Los cambios que se deben operar en el profesor son entre otros:

Ø Elevar su formación técnica, adaptándose a los nuevos tiempos y las nuevas tecnologías.

Ø Aceptar que no todo puede estar escrito, sino que podemos valernos de imágenes, vídeos, entre otros recursos multimedia.

Ø Aumentar la forma tutorial de enseñanza.

Ø Trabajar más en el diseño evaluativo donde se conjuguen diversas formas de  evaluación.

Ø Aumentar el  trabajo  individual o independiente, responsables inmediatos de la profundización de sus conocimientos.  

  

Algunas ventajas se obtienen con las tics:

Se minimizan el uso de locales físicos, y se diversifican los entornos virtuales (aulas, laboratorios, salas de computación, puesto de trabajo).

Se agiliza la dinámica de trabajo, porque se puede navegar por la red y no hay que desplazarse necesariamente fuera del aula.

Se sociabiliza la información.

Se facilita el proceso de la enseñanza al desplazarse más rápidamente la información por la red.

Se amplían los recursos que contienen información, se ofrecen diversos entornos virtuales donde se pueden visitar  bibliotecas virtuales, museos, galerías, exposiciones, etc.

Es indudable que estamos asistiendo a un proceso de desaparición de la forma clásica de la enseñanza a nuevas formas educativas que reclaman una mayor competencia del docente.

En nuestras manos aún está el perfeccionamiento educativo de la humanidad, no lo dejemos 

escapar. 

Paola - Diego